Mi prima Paula
Me lo dijo un domingo a la tarde en uno de los típicos almuerzos familiares que teníamos siempre. Notaba como Paula estaba distraída, no estaba prestando mucha atención a la conversación de nuestros padres, se tocaba el pelo castaño lacio que tenía y lo enredaba entre sus dedos. Nos llevamos 10 años con Paula pero la siento como mi prima más cercana, por lo que cuando me dijo que quería hablar en privado no lo pensé dos veces y fui. Me llevó al patio de su casa muy nerviosa, caminaba rápido y cuando paramos no dejaba de tambalearse entre ambos pies. Ahí me confesó que estaba saliendo con Morena y que no sabía cómo decírselo a su mamá porque era de una generación diferente y no sabía si iba a entender lo que le pasaba. Al principio quedé en shock, no podía creer que esas palabras habían salido de su boca y que me las había dicho a mi. Intenté tranquilizarla lo más que pude y le dije que intente introducirla al tema de a poco, que empiece a tener conversaciones sobre sexualidad para ver cómo reaccionaba y como se lo podía decir de una manera que no le afecte mucho a ella, a Paula.
Pienso en cómo habrá hecho para vivir tanto tiempo en la oscuridad, que feo debe de haber sido estar ocultándose por estar con quién ama. Que sociedad espantosa en la que vivimos si existe gente tiene que estar huyendo por miedo a que le hagan daño. Odio que Paula tuvo que pasar por eso. Y odio que ella vaya a tener que sufrirlo alguna vez cuando empiece a ser más abierta con su identidad. Pero tengo que dejar de pensar en lo negativo. Paula está con Morena y soy la única persona que lo sabe, Paula está feliz y por eso estoy feliz por ella. Nadie se va a enterar por mi boca de este secreto.
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